Page images
PDF
EPUB

ber nuestros pensamientos solamente con el designio de satisfacer su pasion y su injusticia, no tienen en este caso ningun derecho á que les digamos la verdad; y la sinceridad sería una virtud muy cruel, si debieramos observarla con aquellos que se servirian del descubrimiento de la verdad para cometer un crimen.

Reducidas las cosas á estos terminos, y tomadas con todas las limitaciones que hemos referido, no puede resultar ningun inconveniente: los casos en que es permitido usar de disimulacion se reducen á un corto núme ro, y la obligacion en que estamos de decir la verdad subsiste en todo su vigor.

CAPITULO VI.

Del juramento.

Como el juramento da mucha autoridad y credito á nuestros discursos á todos los actos en que interviene la palabra, el órden natural exige que

y

tratemos aqui de esta importante materia.

El juramento es un acto por el cual, para dar mas autoridad y crédito á nuestros discursos ó á nuestros contratos, nos sometemos de una manera formal á la justa venganza de Dios en caso de mentira ó de infidelidad.

[ocr errors]

Por su fórmula misma parece que este es el sentido á que se reducen todos los juramentos, y los diferentes modos con que se expresan, manifiestan lo mismo.

Por egemplo: Dios me ayude: pongo á Dios por testigo: que Dios me castigue &c.

En todos tiempos y en todos los pueblos se ha mirado el juramento como una cosa muy santa é inviola. ble. Los Egipcios castigaban de muerte á los perjuros, como culpables de dos grandes crimenes; el uno de violar el respeto debido á la divinidad, y el otro, de faltar á la obligacion mas sagrada entre los hombres.

En efecto, no hay vinculo mas

fuerte que el juramento para impedir que los hombres falten á su palabra. ,,Nullum enim vinculum ad astringendam fidem jurejurando, majores arctius esse voluerunt. Cic. de Off. hb. III. cap. XXXI.

El deber general que la ley natural prescribe, es que no juremos sino lo menos que podamos y con respeto religioso, y que cumplamos inviolablemente aquello á que nos obliga, mos por el juramento.

Entraremos en algunos pormeno: res. El uso del juramento supone la desconfianza, la infidelidad, la ignorancia y la debilidad de los hombres, y se ha establecido como un remedio contra estos males.

[ocr errors]

Y ciertamente no se puede emplear un medio mas eficaz para obligarnos á decir la verdad, ó á cumplir la palabra, que el temor de un Dios que todo lo puede y que todo lo vé, y á cuya justicia nos sometemos nosotros mismos en caso de perfidia ó de mentira.

De esta suerte, el objeto y fin del

juramento por parte de aquel que jura, es dar mas crédito á sus discursos y conciliarse la confianza; y por par te del que recibe el juramento, asegurarse de la sinceridad, ó de la fidelidad de aquel con quien tiene que

tratar.

Siendo esto asi, el juramento, con respecto al comercio de la vida, es propiamente un medio de sociedad, y no debe considerarse sino como un acto civil: es una seguridad que exigimos, y cuya fuerza depende de la impresion que hace en los hombres el temor de la divinidad.

[ocr errors]
[ocr errors]

Para conocer bien en que consiste la obligacion y la fuerza del juramento, es prciso, 1. saber lo que es esencialmente necesario al juramento para que sea verdaderamente tal y que podamos decir con razon, que el que le ha prestado ha jurado en realidad.

Ahora bien, es esencial el juramento, considerado en si mísmo: 1.° que termine siempre en la divinidad: 2.9 que encierre una sumision á la jus

ticia divina en caso de perfidia ó de mentira.

Ademas de esto, para que conceptuemos que el que pronuncia un juramento, ha jurado en realidad, es preciso: 1. que sea conforme á la religion del que le presta: 2. que el que jura tenga el uso de la razon: 3. que tenga verdaderamente intencion de poner á Dios por testigo; 4. que jure libremente y no por una violencia injusta.

Aclararemos algo mas estas ideas. Digo, pues, que aunque la forma del juramento puede variar en las pala bras, el juramento es siempre el mismo en la esencia, es decir, que debe terminar siempre en la divinidad.

Porque como Dios solo tiene un conocimiento y un poder infinito, es claro que no podemos sin cometer un absurdo jurar por un ser á quien no miremos como á un Dios, es de cir, en quien no reconozcamos la omnipotencia, la sabiduria, y una perficta usticia.

Y aunque las ideas que tenian los

« PreviousContinue »